1986. Mundial de México. Seguramente, el de más valor para la Selección Argentina ya que lo obtuvimos de visitantes, invictos y sin tiempos suplementarios ni penales. En ese entonces, la selección jugó los siete partidos. Y por esas èpocas, a nadie se le ocurrió “institucionalizar” los televisores en las escuelas. El “boom” comenzó luego de 1990 tras aquellas históricas definiciones por penales en el Mundial de Italia.
En 1986 teníamos que tener a escondidas una radio y enterarnos cómo iban los partidos. Pero a clase había que ir.
Desde hace algunos gobiernos, cada cuatro años se “oficializa” el uso de televisores en los colegios, pero en el gobierno actual se está proponiendo entregar televisores a las escuelas para que todos puedan ver el mundial y no faltar a clase.
Esto es un error más grave de lo que se cree. Porque de esta manera, desde “arriba”, se está distorsionando la escala de valores de una sociedad que, guste o no, necesita del trabajo y sobre todo de la educación para salir adelante.
Se sabe que cuando juega Argentina se para el país. Esto es inevitable. Pero no es necesario desde el gobierno “institucionalizar” el uso de televisores. Siempre hay algún padre, maestro o vecino que podrá llevar una tele. Y si así no fuera, no se puede justificar desde una autoridad gubernamental, la falta a clases del alumno. Sino, se estaría justificando al padre que tiene que faltar a su trabajo para cuidarlo (de acuerdo la edad).
Además, desde hace algunos mundiales que nos venden el verso que “los docentes aprovecharán para enseñarles a los chicos Geografía e Historia acerca de los países participantes, su economía, su ubicación... “ bla bla bla...
Mentira. Absolutamente mentira. Una vez que se apaga el televisor, el profesor putea porque Pekerman no puso a Messi, porque Tevez salió cinco minutos antes, porque Cambiasso no marcaba a nadie... Es más, termina dando la clase más caliente que antes y de lo que menos quiere hablar es del país organizador.
No nos mientan más muchachos.... no nos vendan más buzones...
Quien esto escribe no se opone a la medida porque “no pudo ver el mundial del 86 en directo como se ve ahora", sino porque es un nuevo disparate de Cristina. Es un “disparo demagógico” más de un gobierno que a estas alturas, utilizará todo lo que esté a su alcance para lograr dentro de un año y medio, gobernar por cuatro años más.
LA TENIA "CLARA"
Hace 7 años